3.1

Veladas planificaciones allende las fronteras

Malatesta se había fugado a Argentina a comienzos de 1885 para escapar de la prisión en Italia. Su estadía en Sudamérica estaba inicialmente planificada para ser breve, como le relata él mismo a Max Netlau en una carta del 12 de enero de 1931, pero las cosas resultaron distintas. El conocimiento del historiador sobre los años de Malatesta en Sudamérica es por cierto irregular, pero la evidencia disponible es más que suficiente como para demostrar que no estuvo para nada inactivo. En 1885 editó una nueva corrida de La Questione Sociale en Buenos Aires. En 1886 él y unos cuantos compañeros intentaron infructuosamente buscar oro en la Patagonia — el episodio por el cual su estadía en Sudamérica es más conocido en relatos romantizados. En los dos años siguientes Malatesta hizo una poderosa contribución a la fundación del movimiento obrero argentino, cooperando en agitaciones obreras con inmigrantes anarquistas españoles. Por medio de sus encuentros, reportados regularmente por periódicos anarquistas españoles como El Productor de Barcelona, La Bandera Roja de Madrid, y La Solidaridad de Sevilla, se mantuvo en contacto con el movimiento español. Y en cuanto a sus continuos contactos con el movimiento italiano, surgen evidencias precisamente de los eventos ligados a su retorno a Europa.1
Describiendo el retorno de Malatesta a Europa en 1889 su biógrafo y amigo Luigi Fabbri relata áridamente que 'en octubre de 1889 Malatesta ya estaba en Niza, donde comenzó con la publicación de L'Associazione'. Sin embargo, Fabbri sigue, 'no pudo permanecer en Niza por mucho tiempo, dado el hecho de haber sido expulsado de Francia diez años antes. La policía lo buscaba después de haber expuesto en L'Associazione al viejo espía Terzaghi... Sin embargo, pudo refugiarse fácilmente en Londres sin ser capturado, siguiendo ahí con la publicación del periódico'. Nada se dice de las razones de Malatesta para escoger Niza, sus contactos, y sus planes. De igual modo, el cambio a Londres pareciera ser un remedio apresurado a una situación que cambia repentinamente para mal. Pero, dicha apariencia de casualidad es muy a menudo efecto de la opacidad de la acción anarquista. La escasez de fuentes no es accidental, sino inherente a la naturaleza de un movimiento que en la mayoría de los casos no podía operar a la luz del día. Además, los biógrafos militantes como Fabbri compartían tales preocupaciones y filtraban su escritura con cautelosa reserva.
Este es un caso en el que una investigación empírica conducida por el principio heurístico de la racionalidad puede llevar al historiador émulo de Auguste Dupin a hacer descubrimientos con amplias implicancias interpretativas. De hecho, al sondear la apariencia de fortuito en los relatos contemporáneos se asoma una realidad distinta, consistente en planificación y organización sostenidas por una densa y constante red de contactos militantes repartidos por todo el océano Atlántico.2
De acuerdo a los registros policiales italianos, Malatesta despareció de Buenos Aires un 22 de junio de 1889.
En contraste con el relato estándar de que Malatesta se estableció de inmediato en Niza, su primera parada fue en Barcelona. El Productor del 19 de julio reporta dos encuentros recientes con Malatesta, en los que 'se discutió los temas más importantes del socialismo militante, especialmente aquellos relacionados con las escuelas comunista y colectivista'.3 Así, fue una breve pero significativa detención. El Productor era un centro organizativo clave para el anarquismo español, y el paso de Malatesta en Barcelona era parte de su red de contactos con los españoles. Esta es la primera instancia de un tema recurrente: la participación transnacional mutua en los movimientos de unos y otros países por anarquistas de distintas nacionalidades, que fue un aspecto característico del transnacionalismo anarquista. La participación de Malatesta en el anarquismo español era profunda. Como se verá, su preocupación por la controversia anarquista española entre colectivistas y comunistas sería un motivo clave en su giro teórico de 1889.
En la ocasión, Malatesta fue probablemente instrumental en la consumación del Encuentro Internacional Anarquista que tomó lugar en París del 1 al 8 de septiembre de aquel año. La reunión congregó a notables figuras del anarquismo italiano, español y francés, como así también a representantes alemanes y británicos. Malatesta acudió a éste. La idea del congreso había sido lanzada por los anarquistas italianos en París el año anterior, y había sido recibido con vacilación por los diversos grupos europeos. Eventualmente, La Révolte publica una carta el 19 de julio de 1889 desde Barcelona, expresando la intención de los anarquistas españoles de llevar a cabo la iniciativa: 'Tuvimos noticias de ciertos grupos de otras latitudes que tienen nuestro mismo deseo y mismo lamento de que no se haya fijado fecha aún'. La fecha de la carta y la referencia a grupos de otras latitudes sugiere que la iniciativa fue discutida durante la visita de Malatesta. Fue por cierto esta carta la que puso en marcha el arreglo para la conferencia.4 Malatesta ya tenía una idea de los eventos en el anarquismo europeo antes de que su retorno se conociera siquiera.
Toda la evidencia indica que Londres, no Niza, era el destino de Malatesta. Ya el 22 de abril, el ministerio de asuntos exteriores había informado a la embajada en Londres que Malatesta y Francesco Pezzi habían dejado América en rumbo a Londres.5 La información era incorrecta, pero apunta a la implicación de Londres en los primeros planes de Malatesta. Luego, un telegrama del 9 de agosto desde el vice-secretario italiano de extranjería, Damiani, a la embajada en Londres reporta que Malatesta está en París, posiblemente en dirección a Londres. Otra nota de Daminai el 15 de agosto reporta que Malatesta había ciertamente llegado allí.
Más evidencias de una estadía extendida en Londres en agosto de 1889 se revelan en la historia de un pasaporte. Le fue hallado a Malatesta en su arresto en Suiza dos años más tarde. Portaba el nombre de Felice Vigliano. Junto al pasaporte, se le halló un boleto para el Museo Británico con fecha 27 de agosto de 1889, también a nombre de Vigliano. La policía italiana hizo considerables investigaciones sobre el pasaporte. Sin embargo, fue el boleto el revelador. Vigliano era un anarquista italiano emigrado a Sudamérica. Resulta ser que, en la fecha que aparece en el boleto él estaba editando el periódico Il Socialista en Montevideo. Por ende, otra persona obtuvo ese boleto en el Museo Británico el 27 de agosto de 1889, y esa persona fue Malatesta. La comparación entre la firma en el registro del museo para admisión temporal y muestras de la letra de Malatesta dejan poco espacio a la duda incluso para el ojo no entrenado. La explicación más obvia es que Vigliano nunca abandonó Sudamérica, y Malatesta obtuvo su pasaporte antes de irse, reteniéndolo hasta su arresto de 1891.
En resumen, el retorno de Malatesta fue cuidadosamente planificado y arreglado con bastante anterioridad. Más importante es que, lejos de ser una solución improvisada para una situación de emergencia, Londres, la gran capital del exilio revolucionario, donde Malatesta ya había residido en 1881-82, era su destino de elección desde un comienzo. Al establecer este punto una imagen distinta, de planificación y organización efectiva, comienza a reemplazar aquella estándar de espontaneidad, falta de organización, e impotencia frente a los eventos.6
A su llegada a Londres, Malatesta no estaba solo ni aislado, sino que podía contar con una red de militantes. Aparte de conocidos de su estadía anterior, cuando Malatesta retorna a Europa, Francesco Saverio Merlino, uno de sus co-defensores en el juicio de Roma de 1884, también estaba en Londres. Había huido allí tras su condena, aproximadamente al mismo tiempo que Malatesta escapaba hacia Argentina. Merlino sería un contribuyente fundamental en L'Associazione, como así también el compañero más cercano de Malatesta en todos sus emprendimientos en los años siguientes, hasta su arresto en Nápoles en enero de 1894.
Niza entra en escena sólo al mes siguiente. En septiembre de 1889 Malatesta, Merlino, y Pezzi llegan a la ciudad francesa para arreglar la publicación de L'Associazione, solo un mes antes de que apareciese el primer número. Un telegrama del 11 de septiembre desde el vice-consul italiano en Niza, Beauregard, informa al ministerio de exterior sobre su inminente arribo. ¿Cómo se llevó a cabo el proyecto del periódico, y por qué fue Niza su lugar de publicación? Contestar estas preguntas nos ayuda a disipar la impresión de fortuito y aislado que rodea al emprendimiento de Malatesta.7
Los arreglos para un periódico habían comenzado en Niza mucho antes de la llegada de Malatesta, aunque no se sabe si él tuvo parte en ellos. Lo que se sabe, y muy importante, es que la mayoría de las personas involucradas en el proyecto venían de una 'vieja guardia' de Internacionalistas activos en torno a 1876-84 en Florencia — como lo eran Pezzi y su esposa Luisa Minguzzi. Florencia era también el centro de operaciones de Malatesta en 1883-84. Entre aquellos militantes estaban Giovanni Talchi, que había huido de Florencia hacia Niza años antes; Giuseppe Cioci, un antiguo editor de La Questione Sociale en 1884, que llegó a Niza aproximadamente en mayo de 1889; y el tipográfico e impresor Giuseppe Consorti, que llegó al mes seguiente,8 como reporta debidamente el cónsul italiano en Niza, Centurione, al ministro de exterior italiano un 15 de junio. En un memo anterior del 20 de mayo el mismo cónsul había informado al ministro del proyecto de Talchi de publicación de un periódico socialista con el familiar nombre de La Questione Sociale, a ser impreso clandestinamente y ingresado en contrabando a Italia.9 Esto fue bastante anterior incluso al retorno de Malatesta a Europa.
El 10 de septiembre el Consulado Italiano en Niza reporta la inminente publicación del periódico proyectado por Talchi, con la participación de Cioci y otros anarquistas de Niza. El mismo reporte añade que 'Los peligrosos Malatesta, Merlino, y Pezzi, que arribaron en Marsella camino desde América, parecieran haber venido a esta ciudad con propósitos de propaganda anarquista, reuniéndose con el grupo editor de dicho periódico'. Ciertamente, diez días después comenzaron a aparecer anuncios en la prensa anarquista de que L'Associazione aparecería en Niza en octubre.10 El primer número apareció un 6 de octubre, con la fecha errada 6 de septiembre. Con mucha probabilidad fue este un truco para despistar la atención de la policía, ocultándoles que la publicación salía recién de prensa.11 Tanto Cioci como Consorti estaban en el grupo editor. Otro elemento de continuidad fue el administrador del periódico, Giacomo Faraut, quien en 1887 había administrado Lo Schiavo, un periódico anarquista editado en Niza por el amigo de Malatesta Nicolò Converti, ahora emigrado a Túnez.
En suma, hay una continuidad clara entre los proyectos de Talchi y Malatesta, aunque no está claro en qué punto comenzó la participación del segundo. De todos modos, es evidente que al retornar de Sudamérica Malatesta retomó su red de contactos militantes de donde la había dejado antes de partir — asumiendo que la hubo interrumpido — y que dichos lazos fueron instrumentales en la realización de su proyecto editorial. El 'desaparecido' Malatesta 'reaparece' con un nuevo proyecto, en el que los compañeros clave eran los mismos de comienzos de la década de 1880, quienes nunca abandonaron Europa.
La locación de Niza debe haber sido también atractiva para Malatesta para propósitos de ingresar el periódico en contrabando a Italia, dada la proximidad con la frontera italiana. El rol clave de esta ciudad como locación conveniente para el anarquismo transnacional italiano es descrito en un alarmado artículo aparecido en un periódico italiano cinco años más tarde. El artículo destaca que Niza no tiene un club propiamente anarquista como Londres, y tampoco reside ahí ningún líder anarquista. Sin embargo, 'no puede negarse que la anarquía tiene un número considerable de representantes... en tránsito, por así decirlo'. De hecho, sigue el artículo, 'desde y hacia la frontera cercana van y vienen ciertos tipos trastornados, contrabandean prensa anarquista, despachan con facilidad su correspondencia desde allí, y deliberan aquí con sus jefes, quienes, viniendo de París o Londres, escogen a veces la cosmopolita zona de Niza para sus sombrías bandas'. Entre esos 'jefes', Malatesta y Merlino son explícitamente mencionados. En una pocas líneas, el artículo captura vívidamente el carácter transnacional y móvil del anarquismo italiano.
Así, el proyecto de L'Associazione había sido concebido y concretado a través de varios países extranjeros a ambos lados del Atlántico, pero su foco seguía siendo la lucha en el país natal. Como se verá, este fue uno de los rasgos más fundamentales del anarquismo transnacional italiano.

1 Malatesta a Nettlau, Roma, 12 de enero de 1931, Max Nettlau Papers, archivo no. 197, IISG; Gonzalo Zaragoza, Anarquismo argentino, 1876-1902 (Madrid: Ediciones de la Torre, 1996), 98-105; El Productor (Barcelona), nos. 72 (23 de diciembre de 1887), 101 (20 de julio de 1888); La Bandera Roja (Madrid) 2, no. 18 (1 de enero de 1889); La Solidaridad (Sevilla) 2, no. 29 (3 de marzo de 1889).
2 Luigi Fabbri, Vida de Malatesta, 126-7.
3 Prefectura de Roma, "Malatesta Enrico: Cenno biografico al giorno 31 Marzo anno 1896," CPC, b. 2953?, ACS; El Productor (Barcelona), no. 153 (19 de julio de 1889).
4 Préfecture de Police, extractos de reportes del agente "no. 4", París, 24 de agosto de 1888, y el agente "Pairson", París, 28 de enero de 1889, b. BA 30, fs. 177.300-B-12, APP; "Réunion Anarchiste Internationale", La Rèvolte (París) 2, no. 45 (27 de julio - 26 [recte 2] de agosto de 1889); reporte del agente "Jean", París, 12 de agosto de 1889, b. BA 30, fs. 177.300-B-12, APP. Sobre la asistencia de Malatesta, ver el reporte del oficial de policía Sernicoli, París, 9 de septiembre de 1889, Polizia Internazionale, b. 27, fs. "Ambasciata Parigi 1889, arrivo", ASDMAE. Para reportes sobre el encuentro ver: "Résumé de la Reunion Internationale Anarchiste", La Révolte (París) 2, no. 51 (7-13 de septiembre de 1889); "International Notes: France", Commonweal (Londres), no. 193 (21 de septiembre de 1889): 299.

5 Telegrama del ministro italiano de asuntos exteriores a la embajada italiana en Londres, 9 de agosto de 1889, Polizia Internazionale, b. 39, fs. "1889, Ambasciatore Londra, partenza", ASDMAE; Ministerio Italiano de Asuntos Exteriores al chargé d'affaires de la Embajada Italiana en Londres, 22 de abril y 15 de agosto de 1889, Polizia Internazionale, b. 39, fs. "1889, Ambasciatore Londra, partenza", ASDMAE.
6 Reporte del arresto de Malatesta. Lugano, 12 de junio de 1891, JBP, E 21, Ds. 7113, SBB; Ministerio Italiano de Asuntos Externos al Ministerio del Interior, 1 de julio de 1891, CPC, b. 2949, ACS; Registro de las firmas para admisión temporal, entrada A38065 del 27 de agosto de 1889, Archivo Central del Museo Británico, Londres. Sobre la edición de Vigliano de Il Socialista ver: Bettini, vol. 2, 269; "Piccola Posta", Il Socialista (Montevideo) 1, no. 4 (29 de septiembre de 1889): 4, "Da Montevideo", La Rivendicazione (Forli) 6, no. 11 (18 de marzo de 1891): 4.
7 Telegrama desde el Consulado italiano al Ministerio de Asuntos Exteriores, Niza, 11 de septiembre de 1889, Polizia Internazionale, b. 3, fs. "Nizza, 1889, arrivo", ASDMAE.
8 Sobre Talchi, ver: Antonioli, Dizionario biografico, s. v. "Talchi, Giovanni". Sobre el trasfondo de Cioci, ver: La Questione Sociale (Florencia), no. 1 (22 de diciembre de 1883): 3; no. 6 (27 de enero de 1884): 2; no. 14 (6 de julio de 1884): 1. Sobre la llegada de Consorti a Niza, ver: Ministerio de Asuntos Exteriores a la Embajada Italiana en París, 9 de abril de 1889, Polizia Internazionale, b. 27, fs. "Ambasciata Parigi 1890, partenza", ASDMAE; Cónsul italiano Centurione al Ministerio de Asuntos Externos, Niza, 15 de junio de 1889, Polizia Internazionale, b. 3, fs. "Nizza, 1889, arrivo", ASDMAE.

9 Cónsul italiano Centurione al Ministerio de Asuntos Externos, Niza, 20 de mayo de 1889, Polizia Internazionale, b. 3, fs. "Nizza, 1889, arrivo", ASDMAE.

10 Consulado italiano en Niza al Ministerio de Asuntos Externos, Niza, 18 de octubre de 1889, Polizia Internazionale, b. 3, fs. "Nizza, 1889, arrivo", ASDMAE, que cita el reporte del 10 de septiembre, "Nelle Nostre File", Il Nuovo Comattiamo (Génova) 2, no. 7 (21 de septiembre de 1889): 3.

11 Cf. reporte del agente secreto Calvo, Londres, 6 de septiembre de 1892, Polizia Internazionale, b. 39, fs. "1892, arrivo", ASDMAE, que ofrece la eplicación anterior para un error similar de fecha en otra publicación anarquista que involucra a Malatesta.